COLOCATE LOS ZAPATOS DE UN POSMODERNO

PONTE EN LOS ZAPATOS DE UN POSMODERNO

ME COLOQUE EN LOS ZAPATO DE UN POSMODERNO Y CASI ME VUELVO A LA NADA

NO CREEN QUE LA BIBLIA ES PALABRA INFALIBLE DE DIOS.

NO CONOCEN NADA DEL ORIGEN DEL HOMBRE POR CREACION

SUS METODOS PARA COMPROBAR SI ALGO EXISTE SON DISTINTOS A LOS DE LA REVELACION

CUESTIONAN TODO LO QUE NO ENCAJA EN SU COSMOVISION.

VIVEN SOLO PARA EL PRESENTE

NO TIENEN SEGURIDAD DEL JUICIO QUE TODOS LOS HUMANOS DEBEMOS ENFRENTAR ANTE EL TRIBUNAL DIVINO

EL PLACER Y EL DINERO ES TODO EN LA VIDA.

SOLO EN LOS ULTIMOS MOMENTOS DE SU VIDA, CUANDO LA VELA ESTA POR APAGARSE, DICEN: DIOS MIO, SI HAY UN ETERNIDAD PARA MI QUE HE DESPRECIADO TODA MI VIDA, POR FAVOR SALVAME AUNQUE VIVI LA VIDA EGOISTA MENTE, CIERRAN LOS OJOS Y MUEREN, HASTA EL DIA CUANDO COMPAREZCA ANTE EL TRONO BLANCO.

La iglesia primitiva tenía una MISION, exaltar a Jesús, contar cuan grandes cosas había hecho Dios con ellos, difundir las noticias de la muerte y resurrección de su amado Señor, vivir a la expectativa de un mundo nuevo pero con los pies sangrantes por la persecución en este mundo.

La iglesia primitiva tenía una ORGANIZACIÓN, los apóstoles que tenían como misión no dejar morir el mensaje de salvación, los profetas y maestros cuyo objetivo era seguir enseñando las creencias que había plasmado en su vida nuestro gran maestro y Dios. Los ancianos, que debían alimentar la grey que costó la sangre del Cordero Jesús, los principales, que debían servir como diáconos y servidores de la iglesia. Tal jerarquía no era impositiva, dominante, amante del dinero ni de puestos y fama, era la manera de servir a los pequeñitos de Dios.

La iglesia primitiva tenía una DOCTRINA, la misma que Jesús había dejado, el bautismo, la presencia del Espíritu Santo, el amor de Dios, el arrepentimiento y perdón de los pecados, el llevar a otros el evangelio de salvación, una iglesia comprada con su sangre, el partimiento del pan y del vino, la comunión con Dios por medio de su santo día, la gracia regalada y la salvación por fe en Cristo. Todas estas eran creencias firmes que no podían vender ni violar.

La iglesia primitiva tenía unas NORMAS, que debían cumplir fuera de sus doctrinas, el tener todas las cosas en común, la preocupación e interés por las viudas y los huérfanos, las ofrendas para los hermanos necesitados, la unidad de la oración, el participar de los ágapes, el ósculo santo, el trabajo para ganarse la vida,  enseñar desde la niñez las escrituras, el respeto a las damas y ancianos, el no comer cosas inmundas, ni sangre ni ahogado, el borrar a un miembro que anduviese en apostasía o cometiese un error, usaban la dura frase, “entregarlo a Satanás”, la sanidad y la expulsión de demonios.